Existen cuatro formas de activar las zonas ocultas de la mente humana. La respiración El señor de la fuerza. Todas las enseñanzas antiguas como el Chikung (manejo de la energía), el yoga sabían que la respiración es un elemento fundamental, esto es así porque la misma región que controla la respiración también controla las funciones autónomas del organismo. Cuando mediante la respiración activamos esa zona cerebral llamada hipotálamo, estamos accediendo a poder controlar nuestro cuerpo, pudiendo alcanzar estados de conciencia superiores. Visualización Las culturas antiguas también conocían la influencia poderosa de la imaginería mental. Está demostrado científicamente que cuando planificamos utilizando la visualización se activa el lóbulo frontal que a su vez inactiva la amígdala la cual es un conjunto de neuronas que se activa cuando hay miedo. Es decir si visualizamos inmediatamente eliminamos el estrés pudiendo programar situaciones a futuro. El lenguaje. Las palabras que usamos y la manera en la cual las utilizamos impacta profundamente a la mente subconsciente. Si repetimos una frase con la suficiente convicción, el subconsciente terminará por creerla a cabalidad. Por lo tanto la utilización del lenguaje es otro de los factores claves a impactar y controlar nuestra mente. El conocimiento de patrones lingüísticos específicos es lo que nos va a permitir influenciar en un nivel superior a los demás y a nosotros mismos. La postura La posición del cuerpo sumado los elementos anteriores es crucial para alcanzar estados especiales de la conciencia. Ciertas posturas específicas de nuestro cuerpo y de los ojos nos permiten acceder a áreas del cerebro específicas que podemos necesitar en un momento determinado a voluntad. Como es arriba es abajo En las líneas siguientes de este libro te vas a sorprender con el nivel de detalle que vamos a alcanzar en el análisis de tu vida, esto es así porque si le damos una organización al universo mental y espiritual este se traducirá en el mundo físico. Dicho de otra manera mente, espíritu, cuerpo y realidad física estan íntimamente relacionados, si hay caos en la mente, hay caos en todo lo demás, por otro lado si hay una mente enfocada habrá orden en todo lo demás.